El acto de rebeldía de Arthur empaña el plan de regreso del Barça a la Champions

Arthur, durante un partido ante el Real Madrid, en febrero de 2019.

Las horas previas al regreso del FC Barcelona a los entrenamientos, con la vista puesta en la Champions, se vieron salpicadas por la indisciplina de Arthur Melo, que no se presentó en la Ciutat Esportiva Joan Gamper. El centrocampista, que la próxima temporada jugará en la Juventus, fue el único futbolista de la primera plantilla que no quiso someterse a las pruebas del Covid-19 exigidas por el protocolo sanitario de la UEFA.

El brasileño podría recibir un expediente disciplinario por parte del club azulgrana, que considera que no ha cumplido con lo estipulado en su contrato. Por contra, el futbolista pretende rescindir su vínculo con el Barcelona y no participar más a las órdenes de Quique Setién, que el 8 de agosto recibe al Nápoles en la vuelta de octavos de la Champions.

Los últimos minutos de Arthur con la camiseta azulgrana datan del 27 de junio en Balaídos. Dos días después se confirmaría su pase a la Juventus, que entregará a cambio al bosnio Miralem Pjanic. Desde aquel día, el ex futbolista del Gremio de Porto Alegre se excusó de los partidos ante Valladolid y Alavés por una amigdalitis y unas molestias en el tobillo. Durante la derrota frente a Osasuna en el Camp Nou fue sorprendido bostezando en el banquillo.

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